Aprende a disparar tu rentabilidad.
¿Te has preguntado alguna vez dónde se va el dinero de tu bar? Imagina por un momento que pudieras ver con rayos X cada euro que entra y sale de tu negocio. ¿Te sorprendería descubrir agujeros por los que se escapa el dinero sin que te des cuenta? No te preocupes, no necesitas superpoderes. Con las estrategias adecuadas y un poco de astucia, puedes convertir tu bar en una máquina bien engrasada que no solo atrae clientes, sino que también guarda más dinerito en tu bolsillo. ¿Listo para descubrir cómo? Sigue leyendo, porque lo que vamos a contarte te cambiará la forma de ver tu negocio.
El mundo de la hostelería es apasionante, pero también es un campo de batalla para tus finanzas. Muchos dueños de bares y restaurantes se enfocan solo en atraer clientes y aumentar las ventas, ¡lo cual es genial! Pero se olvidan de un secreto a voces: tan importante como ganar más es gastar mejor. Un euro que no gastas innecesariamente es un euro que va directo a tu beneficio.

Aquí en The Bar N Bar Consulting, entendemos los desafíos. Sabemos que la presión de los gastos puede ser un dolor de cabeza constante. Por eso, hemos preparado esta guía sencilla pero poderosa para que aprendas a detectar y recortar esos gastos que te están robando la tranquilidad. Porque queremos que tu bar no solo sobreviva, sino que ¡florezca!
No solo te damos consejos, te acompañamos en el camino
¿Cuáles son los gastos fijos y variables de un bar?
Entiende dónde se esconde tu dinero
Antes de poder recortar gastos, lo primero es saber qué tipos de gastos tienes. Piensa en tu bar como en un coche: algunos gastos son siempre los mismos (la letra del seguro, la gasolina que gastas por ir al trabajo), y otros cambian según cuánto lo uses (la gasolina si haces un viaje largo, los arreglos inesperados). En tu bar pasa igual:
Gastos Fijos
Los que siempre están ahí
Son como el alquiler de tu local o el sueldo base de tus empleados. No importa si tu bar está lleno o vacío, estos gastos los tienes que pagar sí o sí cada mes.
Alquiler del local: Cada mes, el mismo importe.
Sueldos fijos del personal: Los salarios de tus empleados que no dependen de las ventas, como los camareros a tiempo completo o el jefe de cocina.
Seguros: El seguro del local, el seguro de responsabilidad civil, etc.
Suministros básicos: Una parte de la factura de luz, agua o gas que pagas aunque el bar esté cerrado (el mínimo).
Cuotas de software o licencias: Si usas un programa de gestión, TPV, música, etc., que pagas mes a mes.
Amortización de equipos: Si compraste una máquina de café muy cara y la pagas a plazos, esa cuota es fija.
Gastos Variables
Los que bailan con tus ventas
Estos gastos suben o bajan según cuánto vendas o cuánto produzcas. Cuantos más clientes, más de estos gastos tendrás, pero también más ingresos.
Coste de la materia prima: Lo que pagas por la comida, la bebida, el café, el hielo… ¡todo lo que usas para preparar lo que vendes! Si vendes más cafés, gastas más café.
Sueldos variables (extras o comisiones): Si tienes personal extra en fin de semana o pagas comisiones por ventas.
Consumo real de suministros: La parte de la factura de luz, agua o gas que sí depende de cuánto uses tus máquinas, cuánto caliente la cocina, etc.
Productos de limpieza: Cuanto más trabajes, más limpias, más gastas.
Material de un solo uso: Servilletas, pajitas, papel de cocina, bolsas para llevar…
Mantenimiento específico: Si se estropea algo por el uso intensivo, el arreglo es un gasto variable.
¿Por qué es importante saber esto? Porque para reducir gastos, primero tienes que saber qué tipo de gasto es. Los fijos son más difíciles de tocar a corto plazo, pero los variables… ¡ahí es donde puedes hacer magia y ver resultados rápidos!
¿Necesitas ayuda para identificar y clasificar todos los gastos de tu bar? En The Bar N Bar Consulting, realizamos auditorías gastronómicas detalladas que te dan esa visión de rayos X que necesitas. Analizamos cada partida para que sepas dónde está tu dinero y dónde puedes optimizar. ¡Descubre cómo nuestra auditoría puede transformar tus finanzas!
Aprende a reducir los gastos sin morir en el intento. Gestionar los menús del día o carta, puede hacer que obtengas más rentabilidad

¿Cómo reducir los gastos en comida y bebida?
Los ingredientes de tus platos y copas son, probablemente, tu mayor gasto variable. Aquí es donde una buena gestión puede ahorrarte una fortuna.
1. Control estricto del inventario: Ni de más, ni de menos
Haz inventario, ¡y hazlo bien!: No basta con «más o menos sé lo que tengo». Necesitas un sistema para contar lo que entra, lo que sale y lo que queda. Puedes usar una hoja de cálculo, un software de gestión o incluso una aplicación sencilla. Hazlo al menos una vez a la semana para los productos más caros y perecederos.
No compres por impulso: Evita comprar más de lo necesario solo porque hay una oferta. El «stock muerto» es dinero parado que se puede echar a perder.
«First In, First Out» (FIFO): Asegúrate de usar siempre los productos más antiguos primero. Parece obvio, pero en el día a día se olvida y acabamos tirando comida en buen estado.
2. Compras inteligentes: Negocia como un campeón
Negocia con tus proveedores: No te quedes con el primer proveedor. Pide ofertas a varios, compara precios y no tengas miedo a negociar por volumen o por fidelidad. Un pequeño descuento en cada compra se suma mucho al final del mes.
Aprovecha los productos de temporada: Las frutas, verduras y otros productos de temporada son más baratos y suelen tener mejor calidad. Adapta tu menú a lo que la naturaleza te ofrece.
Busca proveedores locales: A veces, los proveedores de tu zona pueden darte mejores precios y productos más frescos, además de apoyar a la economía local.
Paga a tiempo: Algunos proveedores ofrecen descuentos por pronto pago. Si puedes permitírtelo, ¡aprovéchalo!
3. Escandallos detallados: El ADN de tus platos
¿Cuánto cuesta realmente cada plato? Un escandallo es como la «receta» financiera de cada plato. Mide exactamente cuánto cuesta cada ingrediente, la porción exacta, incluso el coste de la energía para cocinarlo.
Ajusta tus precios (y tus recetas): Con un escandallo preciso, sabrás si el precio de venta de un plato es adecuado. Si no es rentable, puedes ajustar la receta (usar un ingrediente más económico pero de calidad, cambiar proporciones) o subir el precio.
4. Cocina de aprovechamiento (¡y creativa!)
Dale una segunda vida a los ingredientes: Las verduras que ya no lucen para una ensalada pueden ser una sopa o crema deliciosa. Los restos de carne asada, unas croquetas o un sándwich especial.
Controla las porciones: Sirve las cantidades adecuadas. Si los clientes dejan mucha comida en el plato, es señal de que las porciones son demasiado grandes (y tú estás gastando de más).
Reducir el desperdicio: Formar al personal para que no se malgaste comida al cocinar o servir. ¡Cada gramo cuenta!
¿Sientes que te ahogas en números y porcentajes? En The Bar N Bar Consulting, te ayudamos a optimizar tus procesos de compra, a diseñar un menú rentable con escandallos profesionales y a implementar sistemas de control de inventario que te ahorrarán dolores de cabeza y mucho dinero. ¡Conoce nuestros servicios de optimización y crecimiento para tu bar!
¿Cómo reducir las mermas en un bar?
Evita que el dinero se evapore
Las mermas son esas pérdidas de producto que ocurren en tu bar por diversas razones: desde el robo hormiga hasta la comida que se estropea o se prepara mal. Reducirlas es como encontrar dinero extra en tu caja.
1. Control de porciones al milímetro:
Formación del personal: Entrena a tu equipo para que sirva las cantidades exactas de bebida y comida. Un chorro de más aquí o allá, multiplicado por cientos de servicios, es una pérdida enorme.
Uso de medidores: Vasos medidores, cucharas de ración, básculas. Ayuda al personal a ser preciso.
2. Almacenamiento y rotación inteligente:
Condiciones óptimas: Guarda cada producto a su temperatura y humedad correctas. Un frigorífico que no enfría bien o una despensa húmeda son enemigos de tus ingredientes.
FIFO riguroso: Insiste en el sistema «Primero en Entrar, Primero en Salir». Organiza tu almacén para que los productos más antiguos sean los primeros en usarse.
Fechas de caducidad: Revisa constantemente las fechas de caducidad y planifica el uso de los productos que van a vencer pronto.
3. Prevención del robo (interno y externo):
Controles de inventario regulares: Las auditorías sorpresa o los recuentos frecuentes pueden disuadir el robo interno.
Cámaras de seguridad: Pueden ser un elemento disuasorio y una herramienta para identificar problemas.
Sistema TPV robusto: Un buen sistema de punto de venta reduce errores en los cobros y ayuda a cuadrar el inventario.
4. Gestión de residuos y aprovechamiento:
Minimiza los errores de cocina: Un plato mal cocinado o una bebida mal preparada es merma. Refuerza la capacitación.
Reutilización creativa: Como mencionamos antes, dar una segunda vida a los ingredientes sobrantes o «feas» (pero buenas) verduras.
Reciclaje: No es ahorro directo, pero reduce el coste de gestión de residuos y mejora tu imagen.
¿Necesitas una mirada externa para detectar dónde se te está escapando el dinero en tu bar? Te ayudamos a implementar sistemas de control que te sorprenderán. ¡Contáctanos y hagamos que cada euro cuente!

¿Cuáles son 10 gastos innecesarios que puedes reducir en tu bar hoy mismo?
A veces, el problema no son los grandes gastos, sino un montón de pequeños «vampiros» que te chupan la cartera. ¡Aquí tienes 10 ideas para cortar de raíz hoy mismo!
Luces encendidas sin necesidad: Apaga las luces en zonas no usadas (baños, almacenes, oficina) y fuera de horario. ¡Parece obvio, pero a menudo se olvida!
Equipos encendidos 24/7: Frigoríficos, lavavajillas, televisores… Si no están en uso, ¡desconéctalos o apágalos!
Grifos goteando o con fugas: Una fuga pequeña puede desperdiciar miles de litros de agua al año. ¡Revisa y repara de inmediato!
Servilletas, pajitas o removedores extra: Los clientes a veces cogen más de lo necesario. Coloca dispensadores o entrégalos solo bajo petición.
Productos de limpieza «marca cara»: A menudo, las marcas blancas o productos profesionales concentrados son igual de efectivos y mucho más baratos.
Suscripciones de software o servicios no utilizados: Revisa tus extractos bancarios. ¿Estás pagando por alguna app, servicio de música o suscripción de la que ya no sacas partido? ¡Cancélala!
Compras a última hora o de emergencia: Si te quedas sin un ingrediente clave y tienes que ir corriendo a la tienda de conveniencia, pagarás el doble. Planifica tus compras.
Vajilla y cristalería rota con frecuencia: Si se te rompen muchas copas o platos, quizás sea momento de revisar los procesos de manipulación y lavado, o invertir en piezas más resistentes (aunque más caras, a la larga ahorras).
Publicidad ineficaz: ¿Estás pagando por anuncios que no te traen clientes? Evalúa el retorno de cada inversión en marketing. A veces, un buen marketing digital o el boca a boca es más efectivo y barato.
Comida para el personal no planificada: Si tus empleados comen «lo que sobre» sin control, es merma. Planifica sus comidas con antelación o asigna un pequeño presupuesto.
¡Cada euro que ahorras en estos pequeños gastos se suma rápidamente!
¿Qué es la regla 50/30/20 para los gastos y cómo aplicarla en tu bar?
Esta regla es una forma sencilla de organizar tus finanzas personales, pero ¡sorpresa! También puedes adaptarla un poco para tener una idea de cómo deberían ir tus gastos en el bar. No es una ley escrita en piedra, pero sí una guía útil.
La regla 50/30/20 sugiere que tu dinero se divida así:
50% para «Necesidades»: Gastos fijos y esenciales para vivir.
30% para «Deseos»: Cosas que te gustan pero no son imprescindibles.
20% para «Ahorro/Pago de Deudas»: Dinero para tu futuro.
¿Cómo adaptarla a tu bar?
En el mundo de la hostelería, los porcentajes cambian, pero la idea de dividir y controlar es la misma. Aquí te damos una versión simplificada, ¡pero recuerda que cada bar es un mundo!
~30-35% para el Coste de la Materia Prima (Coste de Producto Vendido): Este es el «50% de necesidades» de tu bar. Es el dinero que gastas directamente en comida y bebida para vender. Si este porcentaje es mucho más alto, tienes un problema grave de compras, mermas o precios.
~25-35% para los Costes de Personal: El «30% de deseos» de tu bar (aunque el personal es una necesidad, es donde más puedes influir). Aquí entran sueldos, seguros sociales, etc. Un control eficiente del personal (horarios, tareas) es clave para mantener este porcentaje a raya.
~15-20% para Otros Gastos Operativos (Fijos y Variables): Aquí meteríamos el alquiler, suministros, marketing, mantenimiento, etc. Es el «20%» que debes vigilar de cerca para que no se dispare.
El resto: ¡Tu beneficio! Lo ideal es que el porcentaje restante sea tu ganancia neta.
Importante: Estos porcentajes son solo una guía general y varían mucho según el tipo de bar (no es lo mismo una cafetería que un restaurante de lujo). Lo esencial es que tú conozcas tus propios porcentajes y trabajes para optimizarlos.
¿Te suena a chino manejar estos porcentajes y quieres que alguien te eche una mano experta? En The Bar N Bar Consulting, no solo te ayudamos a entender dónde estás parado, sino que creamos un plan financiero y estratégico a tu medida para que esos porcentajes trabajen a tu favor y veas crecer tu rentabilidad. ¡Habla con nuestros expertos y transforma tus números!

Más allá de los números: ¿Cómo mejorar tu bar y hacerlo más rentable a largo plazo?
Reducir gastos es solo una parte de la ecuación. Para una rentabilidad duradera, tu bar debe crecer y evolucionar. Aquí es donde la visión y la estrategia marcan la diferencia.
1. Invierte en tu equipo: Son tu activo más valioso
Capacitación constante: Un personal bien entrenado comete menos errores, es más eficiente y ofrece un mejor servicio. Esto reduce mermas, acelera el servicio y mejora la experiencia del cliente.
Ambiente laboral positivo: Fomenta un buen rollo, reconoce el esfuerzo y escucha a tus empleados. Un equipo contento y motivado es más productivo, reduce la rotación (¡y el coste de contratar y formar nuevos!), y se convierte en el mejor embajador de tu marca.
Entrenamiento cruzado: Enséñales a tus camareros a echar una mano en barra si hay mucho lío, o al cocinero a controlar el inventario. Así puedes optimizar la plantilla y ser más flexible.
2. Abraza la tecnología y la automatización
Sistemas TPV modernos: Agilizan los pedidos, el cobro y te dan datos valiosos sobre lo que más se vende y en qué momento.
Programas de gestión de inventario: Te ahorran horas de conteo manual y te dan información precisa para tus compras.
Equipos de cocina eficientes: Un horno más moderno o una máquina de café de bajo consumo pueden ser una inversión inicial, pero te ahorrarán mucho en energía a largo plazo.
3. Marketing digital y la experiencia del cliente
Redes Sociales: No es solo para subir fotos bonitas. Úsalas para interactuar con tus clientes, anunciar eventos, mostrar tu «behind the scenes» y crear una comunidad. ¡Es publicidad a coste casi cero!
Google My Business: Asegúrate de que tu ficha esté impecable, con fotos, horarios y reseñas. Es lo primero que ven los clientes cuando buscan bares cerca.
Eventos y promociones creativas: Organiza noches temáticas, catas, música en directo. Esto atrae a nuevos clientes y hace que los antiguos vuelvan.
La experiencia es clave: Un bar no es solo comida y bebida. Es el ambiente, la música, la atención, esa «energía» que hace que la gente quiera volver. Invierte en crear un lugar donde la gente se sienta bien.
¿Sientes que te faltan ideas frescas o que tus planes no acaban de despegar? En The Bar N Bar Consulting, no solo te ayudamos a ajustar los números; somos expertos en conceptualización, diseño y desarrollo de ideas innovadoras para tu bar. Te ayudamos a crear esa propuesta de valor única, a optimizar tu equipo y a diseñar estrategias de crecimiento que te llevarán al siguiente nivel. Porque tu bar es más que un negocio, ¡es una pasión que merece brillar! Descubre cómo podemos ayudarte a crear un bar que destaque y sea rentable.
En The Bar N Bar Consulting, no solo te damos consejos, te acompañamos en el camino
Hemos hablado de muchísimas formas de reducir gastos y aumentar la rentabilidad de tu bar. Desde controlar el inventario y las mermas, hasta entender tus números y optimizar tu equipo. Cada pequeña acción cuenta y, sumadas, pueden transformar por completo la salud financiera de tu negocio.
Pero seamos sinceros: aplicar todo esto solo, mientras gestionas el día a día de un bar, puede ser abrumador. Ahí es donde entra la experiencia. En The Bar N Bar Consulting, no solo tenemos la experiencia y las herramientas para analizar cada detalle de tu negocio, sino que también tenemos el «salero» y la pasión para ejecutar esas ideas y hacer que sucedan.
Si te sientes atascado, si tus números no cuadran o simplemente quieres llevar tu bar al siguiente nivel de rentabilidad y éxito, no lo dudes.